Aquella urbanidad Página 33
Urbanidad y buenas maneras de épocas pasadas
A lo largo de toda la historia distintos autores, articulistas y personajes anónimos han hecho referencia, de una manera directa o indirecta, a temas sobre cuestiones de educación, buenas maneras, cortesía...
Todos los artículos de Aquella urbanidad
-
El orden y el respeto atendiendo a la edad, capacidad y sexo de las personas. Los saludos.
-
Los secretos, la discreción y los halagos. Las acciones de las personas en sociedad.
-
El trato de respeto hacia los maestros y los compañeros de clase.
-
El cuidado del vestido y el aseo personal.
-
El respeto a Dios, a sus representantes en la tierra y el comportamiento ante los Ministros de la Iglesia.
-
Reglas de urbanidad para niños y niñas en edad escolar.
-
Qué es la urbanidad y otras preguntas generales relativas a la idea general de la urbanidad y la buena crianza.
-
Las bases de la Urbanidad y los vicios que se oponen a ella.
-
Las niñas no hacen visitas ni las reciben, sino que asisten a ellas acompañando a su mamá, a su papá u otra persona de su familia.
-
Las señoras no se levantan ni para recibir ni para despedir a los caballeros; pero sí cuando entren o salgan otras señoras.
-
El comportamiento en la calle debe ser correcto en todo momento, evitando hacer cualquier cosa que pueda molestar a los transeúntes.
-
Cómo debe proceder una niña bien educada con estas personas.
-
El respeto es la base fundamental de la relación con los padres, amén del cariño y la obediencia.
-
Normas de comportamiento de las niñas en la iglesia.
-
Las niñas deben tener respeto a sus padres. abuelos, hermanos y, en general, a todo el mundo con el que se relacione.
-
Los profesores son como nuestros padres en la escuela, a los que debemos hacer caso en todo lo que nos dicen y a los que debemos respetar.
-
Las normas de cortesía con las preferencias galantes que se permiten a las mujeres.
-
Nada tan agradable como una niña limpia y bien compuesta, aunque sean sencillos o humildes sus vestidos.
-
Cesados los peligros de las bellas, ya no fue necesario para ser admitido en estas tertulias, haber roto muchas lanzas en honor de una princesa o de una dama.
-
Perdidas las riquezas de la nobleza por las causas que diremos, fueron recogidas por personas inteligentes y activas, que sin pertenecer a la clase de comerciantes o fabricantes, supieron hacerlas valer.
-
El aumento de los teatros, disminuyó el concurso de las tertulias particulares; quedando así una misma la necesidad de conversar, fue preciso ser menos escrupuloso en la admisión de nuevos miembros en las tertulias.
-
En la Edad Media los lutos consistían en la manera de llevar los trajes más que en el color. Los reyes lo llevaban violeta y las reinas blanco.
-
Las visitas de pésame se hacen en los primeros meses que siguen a la desgracia, y mejor todavía en la primera quincena.
-
Hay que destinar a los huéspedes habitaciones confortables, con todos los objetos necesarios de uso cotidiano.
-
Considerando la mesa como un sitio de placer, no debe invitarse nada más que a personas gratas.
-
Es bien entendido que la dueña de la casa pondrá todo el cuidado posible en romper el hielo entre los invitados, presentando a todos los que no se conozcan.