
El luto en sociedad. Parte primera.
En la Edad Media los lutos consistían en la manera de llevar los trajes más que en el color. Los reyes lo llevaban violeta y las reinas blanco.
La duración del luto.
Por penoso que esto sea, es necesario hablar de los lutos.
Abordemos de frente la cuestión si no queremos renovar la célebre anécdota del anciano príncipe de Haunitz, que había prohibido pronunciar delante de él la palabra "muerte". Una vez que tuvieron que comunicarle la muerte de su íntimo amigo el barón de Bínder, su lector tuvo que buscar el siguiente rodeo:
- No se encuentra ya en ninguna parte el barón de Bínder.
Veamos, pues, lo que los usos establecidos prescriben para los lutos.
Los vestidos no son signos de pena; se puede tener el alma alegre con vestidos de crespón, y en estos casos es precisamente cuando se piensa en la forma de llevarlos con elegancia. Con un dolor verdad no inquietan la moda y sus exigencias, y tanto da unos vestidos como otros. Sin embargo, la moda prescribe determinadas formas y duración de los lutos.
En la Edad Media los lutos consistían en la manera de llevar los trajes más que en el color. Los reyes lo llevaban violeta y las reinas blanco. Ana de Bretaña fue la primera en llevar el luto negro.
Más tarde se llevó tan adelante el rigor, que no se llevaba solo el luto en los vestidos, sino también en los enseres de la casa, en los coches, etc. Los cubiertos se usaban en la mesa con mangos negros. Se llegó a revestir las paredes con tapicerías negras y recibir con las habitaciones a obscuras.
Poco a poco este rigor se ha ido cediendo; los lutos se guardan como un respeto a la costumbre solamente, aunque hay casos de sentimiento verdadero en que una persona lo conserva toda la vida.
"Los lutos se guardan como un respeto a la costumbre solamente"
Los lutos rigurosos son los de los padres, esposos, suegros, abuelos, hijos mayores, yernos, nueras y hermanos. Los lutos simples son de tíos, primos y padrinos. Por los niños pequeños y los amigos no se lleva luto, aunque sean muy queridos.
La duración del luto depende de las costumbres de la localidad; en los pueblos y ciudades suele prolongarse más que en las grandes capitales.
En estas últimas la duración es la siguiente:
Viudo | 1 año de luto | 3 meses de medio luto |
Padres | 1 año de luto | 3 meses de medio luto |
Suegros | 9 meses de luto | 2 meses de medio luto |
Hermanos y cuñados | 6 meses de luto | 1 mes de medio luto |
Tíos | 3 meses de luto | 1 mes de medio luto |
Primos | 1 mes de luto (a voluntad) |
Durante las seis primera semanas de un luto riguroso, las señoras llevarán traje de cachemir negro con alto biés de crespón, sombrero de crespón y velo a la cara. Después este último se sustituye por el gran velo flotante a la espalda, y en los últimos meses solo velo de tul. Los guantes son de Suecia, negros, los zapatos mates, los pañuelos con jaretón y cifras negros, y las sombrillas, paraguas, manguitos, portamonedas y tarjeteros, negros.
El medio luto se lleva en lanilla o seda, según la estación; los colores son gris, violeta, blanco y negro, malva, pensamiento, heliotropo y lila. Se admite ya el sombrero con plumas, pájaros y flores. Los diamantes y las perolas se permiten en las orejas desde las seis semanas del luto.
- El luto en sociedad. Parte primera.
- El luto en sociedad. Parte segunda.
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