
Saludos, encuentros y cortesías.
La urbanidad en los saludos, los encuentros. Ceder el paso ante una puerta.
Saludos, encuentros y cortesías.
¿Qué hará Vd. al encontrar por la calle algún conocido?
Saludaré a las personas conocidas quitándome el sombrero, y me llegaré a hablarles si me indican que lo desean.
¿Con qué mano saludará Vd.?
Siempre me quitaré el sombrero cnn la mano derecha, separándome un poco hacia el lado opuesto a aquel por donde viene la persona a quien saludo.
Si yendo Vd. por la calle con alguna persona, ésta se detiene con otra, ¿qué hará Vd.?
La Urbanidad exige que si la persona a quien acompaño por la calle traba conversación con otra, me separe yo un poco de las dos, paro no oír lo que hablan.
Si la persona con quien Vd. va saluda a otra, ¿qué hará Vd.?
Si el sujeto a quien saluda la persona con quien voy es desconocido para mí, le saludaré quitándome el sombrero, aunque sin decir cosa alguna.
Si yendo con otra persona tiene Vd. que pasar una puerta, ¿qué hará Vd.?
En el paso de una puerta me quedaré el último, y solo pasaré delante en el caso de que se me inste mucho, y aun entonces, protestaré que lo hago para obedecer.
Y al subir o bajar una escalera, ¿que haré?
Observaré el mismo método en las escaleras, a no ser que se haya de llamar a alguna puerta, en cuyo caso me adelantaré para ejecutarlo.
-
16358
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Querer hablar y oírse no sale bien; y si hablarse a solas es locura, escucharse delante de otros será doblada.
-
La moderación es la reguladora de los modales exteriores así en el hombre como en la mujer; pero ésta debe cuidar de precaverse contra aquella excesiva suavidad que la haría parecer melindrosa o encogida.
-
La instrucción es al hombre, considerado física y moralmente, lo que el riego a una planta.
-
Fraseología urbana para las principales ocurrencias de la vida social.
-
La urbanidad y la civilidad para los jóvenes en unas simples cuestiones.
-
Para tener vestidos recatados es preciso que en ellos no haya apariencia alguna de lujo ni de vanidad.
-
Debe ir a dar la bienvenida a los vecinos recién llegados. Lo ideal es que esta visita se haga durante las primeras veinticuatro horas de estancia en la nueva residencia.
-
El reloj se lleva en el bolsillo del chaleco metido en una cadena de oro.
-
La benevolencia, que une los corazones con los dulces lazos de la amistad y la fraternidad, que establece las relaciones que forman la armonía social
-
El niño en el dormitorio y la hora de acostarse.
-
Los padres deben enseñar a sus hijos a ser educados, prudentes, amables y sociables.
-
La conversación es el palenque en donde se ponen a prueba todas las cualidades de talento, amabilidad y finura.