El protocolo de la mujer trabajadora. Cómo debe comportarse una mujer en el trabajo (con vídeo)
La incorporación de la mujer al mundo laboral cada vez es más notable en nuestra sociedad. Carmen Blanco nos da algunos consejos para las mujeres que trabajan fuera de casa
¿Son iguales los hombres y las mujeres? El comportamiento de las mujeres en el trabajo
Biológicamente, no. En derechos y obligaciones, sí. Esta es la teoría, pero en la práctica la mujer todavía no ha alcanzado un nivel de presencia igualitario al de los hombres en el ámbito laboral. Los puestos de responsabilidad, los cargos ejecutivos, los cuadros de mando... están copados por los hombres. Las mujeres tienen, en muchos casos, una presencia casi testimonial en estos niveles jerárquicos. Aunque vamos evolucionando, aún queda mucho por hacer.
¿Qué se debe exigir a una mujer en el trabajo según Carmen Blanco?
Lo mismo que se le debe requerir a un hombre. Entre las características que debe tener un buen trabajador están:
- - La puntualidad. Llegar a tiempo a su puesto de trabajo, a las reuniones, a las citas, etcétera.
- - Ser profesional. Un buen trabajador debe ser exigente consigo mismo. Tratar de hacer las cosas bien.
Te puede interesar: Los compañeros de trabajo y las relaciones laborales (con vídeo)
- - Salir a desayunar. No es apropiado ni aconsejable aprovechar el tiempo del desayuno para salir a hacer la compra o cualquier otro recado de casa. Las 'gestiones caseras' deben dejarse para el horario fuera del trabajo.
- - Educación. Hay que pedir las cosas por favor, dar las gracias, llamar a las puertas antes de entrar en cualquier despacho o departamento, sonreír, saludar, etcétera.
- - Orden. Un buen profesional debe tener su espacio de trabajo bien ordenado, decorado y limpio.
- - Tratamientos. Se debe tener un trato correcto con los jefes y superiores, sin tomarse demasiadas confianzas, como por ejemplo, tutearles o llamarles por algún tipo de mote o alias.
- - Confianzas las justas. No solo el trato debe ser correcto con los jefes y con los superiores, sino con todos los compañeros de trabajo. No hay que tomarse muchas confianzas con las personas con las que se trabaja o con personas con las que se colabora de forma puntual.
- - Vestuario. Es importante vestir de forma apropiada al trabajo que se desarrolla. Salvo en los casos donde se impone o se requiere un determinado uniforme, el vestuario debe ser acorde a la actividad y a la situación.
Cortesías hacia la mujer. Carmen Blanco habla de la cortesía con la mujer
Los gestos de cortesía hacia la mujer deben ser adecuados sin llegar a ser discriminatorios o machistas.
El hombre suele ceder la derecha a la mujer. Cuando caminan por una acera, cede la parte interior a la mujer.
El hombre, baja las escaleras por delante de la mujer. También, aunque parezca lo contario, sube un poco por delante de la mujer, para evitar ir a su espalda -algunos dicen que para no ver el 'trasero' de la mujer-. En este caso hay mucha controversia, porque la razón de protección dada al bajar unas escaleras, se esgrime por algunos autores para la hora de subir una escalera. Un pequeño traspiés se puede solventar si el hombre sube un poco por detrás de la mujer. Ahí lo dejamos.
Las mujeres no deben estar sentadas en las esquinas de una de mesa. Lo que más técnicamente se llama en 'punta de mesa'. Tampoco, aunque cada vez se tiene menos en cuenta, dos mujeres pueden estar juntas en una mesa. Es mejor intercalar hombre-mujer entre los invitados.
La 'famosa' ley o regla del llamado 'descanso matrimonial'. Consiste en que una pareja no puede sentarse junta. Marido y mujer, o cada miembro de una pareja deben sentarse por separado en una mesa.
Antaño, los chicos solían regalar a las chicas, en un baile que se celebraba con motivo del paso de la adolescencia a la edad adulta, una pulsera de flores que se conoce con el nombre de corsage. Este regalo también se solía hacer a las chicas en las conocidas fiestas denominadas puestas de largo o baile de debutantes.
La experta en protocolo Carmen Blanco, visita el plató del programa "Tal como somos" de la Televisión de Castilla y León, para hablarnos de reglas de etiqueta y protocolo para la mujer trabajadora. Cómo debe comportarse una mujer. Cómo debe vestir. Cómo debe ejercer de forma responsable su trabajo, etcétera.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Las relaciones sociales, familiares y profesionales conllevan realizar una serie de acciones sociales entre las que figuran el hacer y recibir regalos
-
Mirar por encima del hombro es una expresión que se utiliza para referirse a personas que se creen superiores o que son arrogantes
-
Los asistentes al enlace deben llevar bien aprendida la lección y no olvidarse de ninguno de los puntos: ¿Cómo hay que ir vestido? ¿Cómo se saluda? ¿A qué hora hay que estar en la Iglesia?
-
La nuevas princesas del pueblo, sin ascendencia real, aprenden protocolo y etiqueta de la mano de los mejores expertos
-
Cuando invitamos a alguien a pasar unos días en nuestra casa debemos encontrar un equilibrio entre ofrecer un buena atención y el hacer respetar algunas normas o reglas fundamentales de la casa. Tanto el anfitrión como el invitados están 'obligados'
-
Por qué utilizamos en plural palabras como felicidades, buenos días, condolencias, saludos, etcétera
Más allá de la gramática y de las reglas de cortesía: El poder de los plurales expresivos y su relación con los buenos modales -
Hay momentos en que por diversas circunstancias podemos cometer algún error. Pero este error no puede servir para etiquetar a una persona
-
El funeral civil o sepelio laico está empezando a tomar auge entre las personas que no desean un oficio religioso el día de su muerte
-
La elección del alcohol es siempre prerrogativa de los anfitriones. Aunque muchos invitados siguen llevando una botella de vino cuando les invitan a una casa
-
Entre los más jóvenes va cayendo en desuso la costumbre de hacer presentaciones cuando varias persona se encuentran
-
Las palabras no siempre son el medio más adecuado para transmitir un sentimiento de apoyo, para reconfortar a una persona que pasa por un mal momento
-
Casi todo el mundo ha experimentado alguna vez en su vida el sentimiento de la rabia o de la envidia