
Las despedidas de las vacaciones. Nos vamos a casa. Despedirse de nuestros 'vecinos'
En la playa o en la piscina, un adiós o hasta mañana es suficiente. Salvo que hayamos entablado una 'pequeña amistad' no es necesario nada más que un simple saludo de cortesía
protocolo.org - FP Pro
¿Nos despedimos o nos vamos sin decir nada? Un poco de buena educación
De la misma manera que se saluda al llegar a un espacio donde hay otras personas, se debe hacer lo mismo en el momento de irse. A ver, hablamos cuando tenemos 'vecinos' muy cercanos, esos que están codo con codo en la playa, la piscina, el campo, etcétera. No cuando tenemos gente a nuestro alrededor, pero a muchos metros de distancia.
Despedidas acordes al la 'relación' establecida
Cuando acudimos al mismo sitio con cierta regularidad, por ejemplo, cuando estamos de vacaciones muchos días, es habitual establecer una cierta amistad con las personas que se suelen poner a nuestro lado en la playa, en la piscina, etcétera. En estos casos, la despedida es 'obligada'. Incluso, se tiene una pequeña charla de despedida.
Si vamos de manera esporádica a la playa o la piscina, pero hemos entablado algún tipo de relación con los vecinos -hemos charlado sobre algo, nuestros hijos se han hecho "amigos", hemos jugado una partida de cartas o de otro juego, etcétera- también es correcto despedirse hasta otro día o hasta otra ocasión.
Te puede interesar: Etiqueta vacaciones. Cómo comportarse de forma correcta en tiempo de vacaciones
Si vamos a una gran playa donde cada cual va a lo suyo, no tenemos por qué despedirnos de alguien que no conocemos y con el que no hemos tenido ningún tipo de trato en todo el día.
Sería lo mismo que despedirse en un cine, por ejemplo, de las personas que hemos tenido al lado cuando hemos terminado de ver la película. Una cosa es ser educado y otra "pasarse de educado".
Si tenemos personas que están muy 'pegadas' a nosotros -cosa que suele ocurrir en los sitios más concurridos- no está de más, si se quiere, decir un adiós de cortesía, pero sin llegar a más. Utilizar la misma forma de saludar o despedirse que utiliza a diario en los sitios públicos, nada más.
Por lo tanto, las despedidas en espacios compartidos pueden ser muy diversas en función de factores como la cercanía y el entorno. También hay un componente cultural muy importante. No en todos los países y culturas se actúa de la misma forma. Hay que tenerlo en cuenta.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Es un gesto que pocas veces tenemos en cuenta si lo hacemos bien o mal. Pero no hay una respuesta única y verdadera
-
Desde muy pequeños hay que tratar de ir enseñando a los niños a participar en ciertas tareas cotidianas de la casa. Una de ella es la de poner la mesa
-
En el transporte debemos diferenciar el largo recorrido del trayecto corto. También hay que tener en cuenta las normas de cada empresa de transporte
-
En una fiesta, podemos hablar de casi todo, siempre que se haga de una forma discreta y prudente. Hay que tratar de hablar sobre temas muy generalistas
-
No es lo mismo nuestro propio cubierto que los cubiertos de servicio que utilizan todos los comensales para servirse de fuentes o recipientes comunes
-
En un automóvil podemos llevar, en algunas ocasiones, a personas que van a diferentes destinos o direcciones. ¿Qué podemos hacer?
-
Calcular de forma precisa la cantidad de alimentos y bebidas para una fiesta supone un ejercicio de práctica y cálculo matemático. Hay unas medidas establecidas aunque los anfitriones pueden tener, por experiencia, sus propias reglas
-
Caminar de forma correcta en cualquier calle es importante para mantener una buena y fluída "circulación" de las personas
-
Hablar en un transporte público es algo habitual, aunque no siempre lo hacemos de forma correcta y educada. Es relativamente habitual escuchar tonos de voz muy altos
-
El número de invitados es una de las piezas claves a la hora de organizar un evento o celebración.
-
Los cubiertos de mesa se debe sujetar por el mango, y de una forma determinada
-
El cortejo de salida difiere en ciertos aspectos del cortejo de entrada a la iglesia o templo.