
La conclusión y posdata de las cartas.
La conclusión de una carta familiar era en otro tiempo un negocio de importancia; hoy se pone menos cuidado, y con mucha razón.
La conclusión y posdata de las cartas.
La conclusión de una carta familiar era en otro tiempo un negocio de importancia; hoy se pone menos cuidado, y con mucha razón. ¿De qué sirve decirse el humildísisimo, afectísimo, obediente, etc. de una persona a quien se trata con amistad y franqueza?
El buen gusto, que ha mudado todas las cosas, ha cambiado también estas fórmulas y las ha simplificado, pero conservándolas para con los superiores y compañía.
Posdata.
Se llama posdata lo que se añade a la carta después de firmada, y por lo general se señala con estas dos letras P.D.
Las posdatas indican poca atención; por eso no deben usarse sino entre gentes que se tratan sin cumplimiento y para dirigir sus expresiones o memorias a alguno.
-
15722
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Los cabellos no son un adorno verdadero, sino en tanto que están bien limpios y tengan aquella flexibilidad viva que favorece las ondulaciones.
-
El método mas cómodo, grato y libre de inconvenientes para repartir los manjares, es prevenir que se saquen a la mesa ya trinchados
-
Los padres deben enseñar a sus hijos a ser educados, prudentes, amables y sociables.
-
Después de la ceremonia religiosa, se debe saludar con un aire respetuoso, y que manifieste sentimiento a las personas que hacen el duelo.
-
En los almuerzos y comidas de ceremonia se suelen estilar ciertos usos y costumbres muy especiales
-
No manifestéis mucha alegría si la fortuna os favorece, ya porque una alegría mayor que la importancia de la cosa denota pequeñez de ánimo.
-
Después de nuestros padres, nada hay que nos toque tan de cerca como nuestros hermanos.
-
Desembarazados ya de todos los negocios, como de todos los placeres, la cena se hacía sin cuidados ni inquietudes.
-
Las personas desocupadas se dedican en los países civilizados a cultivar el talento con la lectura, o se entretienen en amenas e instructivas conversaciones.
-
Cuando muchos hablan a un tiempo, parece que oye uno a las ranas que se empeñan a porfía en sobrepujarse unas a otras y procurarse la gloria de ensordecer a cuantos las oyen.
-
El niño y el comportamiento en el juego.
-
En estos actos, a los que por deberes políticos, asisten personas de pueblos humildes, que sólo están acostumbradas a comer en la modesta mesa de su hogar...