Obligaciones positivas. Respecto a los padres
Dentro del seno familiar la figura de los padres representa la mayor autoridad y se les debe un respeto

ASSY - Pixabay
Obligaciones para con los padres
Tenemos para con los otros algunas obligaciones, que son generales y comunes para todos, y otras respectivas a cada uno en particular.
Obligaciones generales
Nuestras obligaciones generales para con todos los hombres se encierran en estos dos preceptos, no hacer a otro lo que no queramos que se nos haga a nosotros, y hacer con los otros lo que queremos que se haga con nosotros mismos . El primero de ellos contiene las obligaciones que se llaman negativas o de rigurosa justicia. El segundo, las obligaciones positivas o de beneficencia.
Obligaciones positivas
Estas se reducen a hacer a todos todo el bien que podamos .
Los actos que principalmente debemos ejecutar en beneficio de los demás son los que se llaman obras de misericordia, así espirituales como corporales, que no repetiremos aquí, estando ya explicadas en el Catecismo.
Solo añadiremos que no hay en el mundo deleite más dulce y más puro que el de hacer bien a otro , ni satisfacción que más llene nuestro corazón que la de poder hacer feliz a alguno.
Así, siempre que se presente ocasión de poder favorecer a cualquiera, debemos aprovecharla con el mayor anhelo, sin detenernos en sufrir cualquiera incomodidad que traiga consigo, seguros de que la complacencia que nos resultará, la compensará superabundantemente.
Obligaciones particulares
Respecto a los padres
Después de Dios no hay obligación más estrecha que la que tenemos a nuestros padres.
Además de habernos dado la vida, han empleado todo su cuidado en conservarla. Ellos nos mantienen, nos visten, y nos proporcionan todas las comodidades que disfrutamos, se desvelan y afanan continuamente para educarnos .
Siendo estos beneficios los mayores que se nos pueden hacer, ha de ser proporcionada por nuestra parte la gratitud.
A los padres debemos pues tenerles:
1º. Un amor sincero, y el mayor después del que profesamos a Dios.
2º. Un verdadero agradecimiento, que nos haga tener continuamente presentes los beneficios que de ellos hemos recibido y recibimos, y procurar pagárselos del mejor modo que podamos, ayudándoles, sirviéndoles y complaciéndoles en todo.
3º. Una verdadera sumisión y obediencia; pues estando ellos encargados de nuestra educación, debemos ejecutar pronta y gustosamente lo que nos manden, tenerles todo el respeto posible, abstenernos de toda acción o palabra que pueda ofenderlos, recibir con humildad sus avisos, y correcciones, y aun sufrir con gusto los castigos que nos impongan para corregir nuestros vicios y defectos.
-
6689

Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Es una regla importante de urbanidad el someternos estrictamente a los usos de etiqueta que encontremos establecidos en los diferentes pueblos que visitemos
-
La lectura puede ser una medicina eficacísima contras las dolencias del espíritu si en su elección se medita y se acierta.
-
Las visitas de pésame se hacen en los primeros meses que siguen a la desgracia, y mejor todavía en la primera quincena.
-
Dejamos sentado que antiguamente era grande el exceso en el comer y en el beber, lo cual está probado con buenos y numerosos documentos.
-
Si deseamos nos acompañe a la mesa persona distinguida, la invitación se hace de palabra o por escrito unos días antes del convite.
-
Los asesinos que osaban atacar al rey, a cardenales, a obispos, a condes acompañados de mucha gente, y asaltar ciudades poderosas, debían ser formidables para los viandantes particulares.
-
El niño mirará siempre con horror tod acción o palabra, que de a entender desobediencia, desprecio, burla o poca atención a sus padres.
-
La entrevista no es un monólogo pero tampoco una conversación. Solo debe responder cuando se le pregunta
-
El hombre amable debe ante todo tener un carácter movible que se preste a todos los gustos.
-
Con relativa frecuencia se ven casos de matrimonios que, poseyendo, al parecer, todos los elementos indispensables para ser dichosos, viven en constante discordia ...
-
Hay que destinar a los huéspedes habitaciones confortables, con todos los objetos necesarios de uso cotidiano.
-
Hay ciertas reglas que sirven de base y fundamento a todas las demás reglas del tacto social



