
La conveniencia del tratamiento de tú
Fraseología urbana para las principales ocurrencias de la vida social: el tuteo
foto base vardansevan - Pixabay
Cuándo no conviene tratar de tú a una persona. El tuteo
Aquella urbanidad
El tratamiento de tú no es tan conveniente ni suena tan bien como el de usted; es propio solamente de aquellas personas que se tratan con la mayor franqueza. Sin embargo, merced a los caprichos de la moda y las exigencias de ciertos entes, da color de costumbre de buen tono, va cundiendo entre las señoritas del gran mundo el abuso de tutear a sus padres con mengua de su excelsa autoridad y olvidando el respeto y sumisión profunda que les deben, relajándose de esta suerte los lazos con que una hija está obligada a los autores de su existencia.
La niña, al dirigirse a una persona de respeto o con la cual no tenga mucha familiaridad, en vez del pronombre yo, dirá una servidora de usted. Si le hiciese alguna pregunta jamás le contestará a secas "si" o "no", pues estas expresiones han de ir seguidas de señor o señora, añadiendo al mismo tiempo el título, cuando la etiqueta se lo concede por su rango.
¿A quién se da el tratamiento de tú? A los inferiores, como de padres a hijos, de amo a criado; y entre hermanos, parientes y amigos. Entre estos últimos debe escasearse lo posible.
Te puede interesar: Tutear. ¿Prefiere que le trate de tú o de usted?
La persona con quien hablamos ha de ponerse en primer lugar cuando la nombremos y nosotros en el último; así diremos: "cuando usted", "su señora y yo volvamos a tal punto...", etcétera.
Debemos ser muy parcos en hablar de nosotros mismos y de nuestras familias, y siempre lo haremos con mucha modestia. En este último caso, evitaremos el decir, "mi señor padre", "mi señora tía"; pero ese dictado de señor o señora deberá añadirlo un tercero que pregunte por la salud de éstos, verbi gratia -v. gr.-: ¿Cómo se encuentra su señor padre?
-
12836
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Las primeras dificultades que ocurren a los muchachos, y aún a algunos adultos que carecen de práctica, se fundan sobre el tratamiento que se ha de dar a la persona a quien se escribe.
-
En los sitios públicos hay que guardar cierta compostura, cierta cortesía y ser respetuosos con los demás.
-
Las diversiones son ejercicios a los cuales se puede dedicar algún tiempo del día, para liberar el espíritu de las ocupaciones serias
-
La imitación cuando es burla no es un comportamiento correcto ni educado. Hay que imitar a las personas urbanas y de buena crianza.
-
Es un error lastimoso, y en que jamás incurren las personas que poseen una educación perfecta, el creer que sea lícito conducirse en el templo con menos circunspección, respeto y compostura que en las casas de los hombres
-
El modo de comportarse en la escuela y la forma de tratar con respeto a los maestros.
-
No debe uno permitirse jamás la libertad de apoyar la cabeza en la mano como si no se pudiera sostener
-
Después del amor y la benevolencia, las más bellas cualidades con que podemos adornarnos son la modestia y la tolerancia.
-
El juego es una oportunidad muy importante que tienen los niños para demostrar su buena educación y saber estar
-
No hay que tener la mano sobre la empuñadura de la espada cuando se hable con alguien, o al pasear; es suficiente hacerlo cuando hay obligación de sacarla
-
El bautismo y las obligaciones de los padrinos.
-
Los bailes son sin duda de su agrado, por el gran partido que de ellos saca la belleza. No es cuestión baladí organizarlos para una dueña de casa