¿Qué desea? El teléfono móvil en el supermercado
El teléfono móvil-celular- está presente en nuestra vida cotidiana, incluso cuando hacemos la compra
¿Contestar al teléfono o la persona que nos atiende?
No es demasiado extraño estar haciendo cola en la carnicería, en la pescadería o en la frutería del supermercado, y ver como se desgañita el pobre dependiente o la amable dependienta diciendo a su cliente ¿qué desea? ¿en qué puedo ayudarla? ¿se lo corto fino o grueso? ¿se lo troceo o lo llevará entero?... mientras esa persona charla animadamente por su teléfono móvil -celular- para cabreo general de todos los que esperan a que les llegue su turno. Hay personas que están más atentas a su teléfono que a lo que pasa a su alrededor.
El supermercado, el hipermercado o la tienda de su barrio no son un hospital, ni una iglesia, ni un teatro... pero aquí el uso del teléfono móvil también debe atenerse a unas mínimas reglas de cortesía y buena educación.
Reglas de etiqueta y cortesía para hablar por el móvil-celular en los comercios
Entre las principales reglas de cortesía a tener en cuenta podrían citar estas:
1. No es necesario que apaguemos nuestro teléfono móvil, aunque si es aconsejable mientras hacemos las compras. Salvo que esperemos una llamada urgente, mejor apagado o en modo silencio.
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2. Si suena el teléfono móvil cuando estamos siendo atendidos en cualquiera de los departamentos o secciones de un establecimiento, o bien no contestamos la llamada o bien la aplazamos para un momento más oportuno. La persona que nos atiende merece un respeto y que le prestemos toda la atención necesaria para hacer bien su trabajo.
3. Si estamos por los pasillos y nos suena ele teléfono móvil -celular-, si no escuchamos bien por falta de cobertura o por el ruido ambiente, no debemos ponernos a gritar para que todo el mundo se entere de lo que hablamos. O bien cancelamos la llamada, o bien buscamos un lugar con mejor cobertura y menos ruido ambiente para hablar.
4. Si estamos hablando con unos amigos o familiares que nos hemos encontrado y recibimos una llamada, debemos hacer lo mismo que en el caso en el que nos esté atendiendo un dependiente. O bien dejamos la conversación, pidiendo las correspondientes disculpas, y atendemos la llamada, o bien la dejamos para un poco mas tarde. No es correcto dejar a nadie con la palabra en la boca para contestar una llamada que no es importante.
5. Si no queremos atender una llamada, no debemos dejar que el sonido de nuestro teléfono "martirice" a las demás personas que están a nuestro lado. Se corta, o se pone en modo silencio, pero no se "castiga" al resto de las personas con nuestra melodía de llamada por muy original que nos parezca.
6. En la caja de cualquier establecimiento comercial, debemos tener el mismo comportamiento que en el interior del establecimiento. No podemos hacer esperar a todo el mundo porque estamos hablando por el teléfono móvil-celular mientras el empleado espera por sus artículos o por el abono de la cuenta. Un poco de educación y respeto por las personas que esperan su turno.
7. Si hemos hablado de recibir una llamada, tampoco se nos debe ocurrir hacer nosotros una llamada cuando nos están despachando o cobrando. Podemos ocasionar un trastorno al buen funcionamiento de los empleados y del ritmo de atención a los clientes. Si hacemos la típica llamada a mamá, o a nuestro marido o mujer, para preguntarle si necesita manzanas o bacon, por decir algo, hay que ser lo más breve posible. No podemos aprovechar para abrir una conversación: "mira cariño me acabo de encontrar con fulanito o fulanita...". No. Mientras el pobre empleado pondrá cara de circunstancia o le entrarán ganas de ahogarnos.
8. Si nos encontramos con una persona como la que hemos "dibujado" en los párrafos anteriores hay que mantener la calma y no increparla, aunque que por ganas le tiraríamos el teléfono móvil a la papelera. Hay que ser generosos y darle un tiempo de cortesía. Pasado este tiempo si se le puede hacer una pequeña indicación sobre el perjuicio que nos ocasiona con este retraso por no "estar a lo que está".
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9. Si es un empleado del establecimiento el que se entretiene con el teléfono móvil, salvo que sea por cuestiones de trabajo, como recoger un pedido o atender una reclamación, podemos llamarle la atención, de forma educada, y decirle que tenemos prisa, que tenemos otras cosas que hacer, etc.
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