
¿Por qué hay ocasiones en que es mejor no dar un abrazo? Cuándo no deberíamos dar un abrazo
La importancia de respetar los límites personales: cuáles son los momentos en los que un abrazo puede resultar inapropiado
protocolo.org
Cuándo debemos evitar dar un abrazo. Comportamiento social frente a los abrazos
Ocasiones en las que las reglas de etiqueta aconsejan no abrazar a otras personas
Hay momentos en la vida en los que un abrazo puede ser la mejor expresión de afecto, cariño y apoyo. Damos abrazos como una forma de saludo o bien como una despedida. Pero uno de los mejores abrazos es el abrazo reconfortante. Nos hace sentir bien, nos fortalece y nos anima. Sin embargo, hay ocasiones en las que dar un abrazo no es apropiado.
Abstenerse de dar un abrazo puede resultar conveniente. Hay que analizar cada situación y circunstancias para determinar si puede resultar inapropiado o incómodo dar un abrazo. Hay momentos en los que es mejor abstenerse de dar un abrazo, comprendiendo la importancia de respetar los límites personales y ciertos contextos sociales.
Cuándo debemos evitar dar un abrazo: puntos a tener en cuenta
Te puede interesar: Reglas de etiqueta para dar un abrazo. Para qué sirve un abrazo (con vídeo)
1. Diferencias culturales. En la mayor parte de las sociedades occidentales, el contacto físico es una forma común de demostrar cercanía. Sin embargo, incluso en estas sociedades no todo el mundo se siente cómodo con este tipo de interacción. Debemos ser respetuosos con las preferencias de los demás y no abrazar a las personas que, por la razón que sea, no les gusta este tipo de gesto. Lo que puede ser aceptable para una cultura puede que no lo sea tanto para otra.
2. Conocer a las personas. La confianza y la familiaridad no son universales. Cuando no conocemos bien a una persona, abrazarla puede interpretarse como un gesto invasivo o incluso poco respetuoso. Es mejor esperar hasta conocer mejor a alguien antes de abrazarlo.
3. Ámbito laboral y profesional. Abrazarse en un entorno profesional puede verse como poco profesional o inapropiado. Incluso aunque se tenga una relación personal cercana con esa persona o personas. Es mejor evitar abrazar a nuestros colegas o clientes cuando estamos en el ámbito laboral y, sobre todo, en compañía de otras personas. Cualquier tipo de contacto físico es posible que pueda generar malentendidos o incomodidad entre colegas. Si estamos solos en un despacho o sala de reuniones, podemos hacer este gesto en un contexto de mucha confianza.
4. Enfermedad -que puede ser contagiosa o no-. Desde la pandemia de Covid hemos aprendido a mantener ciertas distancias. Si una persona está resfriada, griposa o con cualquier otra sintomatología, es mejor evitar darse un abrazo con ella.
5. Malos momentos. Cuando alguien está pasando por una situación difícil o delicada, solemos tender a dar un abrazo. Lo que hemos denominado al principio de este artículo el abrazo reconfortante. Una forma para demostrar nuestra compasión y empatía. Sin embargo, es posible que algunas personas no se sientan cómodas con el contacto físico en ese estado emocional. Es mejor preguntar antes de abrazar a alguien que está pasando por un mal momento. Podemos apoyar a esa persona sin invadir su espacio personal. La 'invasión' del espacio personal puede resultar muy molesta.
protocolo.org
6. El factor más evidente. Cuando alguien no quiere ser abrazado. Debemos aprender a respetar los límites de los demás. Si una persona se aleja cuando tratamos de darle un abrazo, es mejor respetar sus deseos. Ni por asomo, debemos tratar de insistir en dar un abrazo.
Los abrazos son una forma poderosa de expresar afecto, cariño, apoyo o consuelo, o simplemente una forma cercana de saludar o despedir a una persona. Pero no siempre son apropiados o bien recibidos en todas las situaciones. Sin embargo, es importante tener en cuenta el contexto y respetar el espacio personal de las personas. Debemos ser conscientes de los momentos en los que es mejor abstenerse de dar un abrazo, respetando las preferencias y límites personales de los demás. Al hacerlo, demostramos un mayor grado de respeto, empatía y comprensión hacia quienes nos rodean.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
La etiqueta femenina viene marcada, al no existir como tal, por la etiqueta masculina. Es decir, según vista el hombre así debe vestir la mujer
-
El uso "abusivo e indiscriminado" del teléfono móvil rompe de manera descarada el protocolo social ignorando una de sus máximas premisas...
-
Una aproximación sobre la formación que debería tener la futura Reina de España. Eva Sannum y su formación para ser reina
-
Tener unas buenas habilidades sociales es fundamental para poder ser unos buenos comunicadores
-
La evolución de las normas sociales es importante para no tener la sensación de que tratamos de seguir normas demasiado arcaicas o desfasadas para el mundo actual
-
Comportamientos que desafían la paciencia de los camareros en los restaurantes
-
La confianza se puede entrenar. La psicóloga Patricia Ramírez nos enseña cómo, dándonos unos sencillos consejos
-
Casi todo el mundo ha experimentado alguna vez en su vida el sentimiento de la rabia o de la envidia
-
La forma de sentarse puede darnos algún tipo de información sobre la persona y su educación
-
Advierte que en cuanto se está sentado a la mesa, no hay que dejarse llevar de la intemperancia de la boca, mirando con avidez los manjares
-
Ser importante conlleva una gran responsabilidad para la que muchas personas no están preparadas
-
Cuando no somos muy organizados puede resultar difícil gestionar bien nuestro tiempo. Por lo general, tenemos tantas cosas que queremos hacer que nos parece que tenemos muy poco tiempo para hacerlas todas. Patricia Ramírez nos da unos cuantos consejos