
¿Deben los anfitriones aceptar los regalos de sus invitados?
Los regalos se hacen para agradar, agradecer y sorprender, pero no para molestar o incomodar. Los regalos pueden ser acertados o poco acertados
protocolo.org - FP Pro
Los regalos que los anfitriones pueden recibir de sus invitados
Es habitual, en la mayoría de las pequeñas celebraciones, que se lleve un regalo a los anfitriones que han tenido el detalle de invitarnos. Nos referimos a esas celebraciones espontáneas, que no tienen que ver con un determinado evento: cumpleaños, aniversarios, etcétera.
Nos invitan a un almuerzo o cena
Es una de las invitaciones más habituales. Qué pueden esperar los anfitriones. Lo más típico es una botella de vino, una de licor, unos dulces o incluso algo para la casa, como una planta o un detalle decorativo.
¿Se debe aceptar un regalo de este tipo? Sí, siempre que sean regalos adecuados, acordes al momento y motivo de la reunión. No tendría sentido invitar a unos amigos a cenar y que se presentasen con unas joyas o un perfume carísimo como regalo, por poner un ejemplo. Un regalo se hace para sorprender, agradar y como un detalle de cortesía.
Te puede interesar: ¿Por qué hacemos regalos? La costumbre de regalar (con vídeo)
El regalo se acepta, incluso aunque no sea de nuestro agrado. Un buen anfitrión debe agradecerlo, y tratar de buscarle una utilidad o un lugar. Cuidado con los gestos y el lenguaje no verbal, puede transmitir sin darse cuenta cosas que no dicen las palabras.
Cuando es un regalo "gastronómico" (botella de vino, dulces, etcétera) hay que tratar de darle uso ese mismo día, si es posible. Si no 'encaja', habrá que dejarlo para una ocasión posterior.
Aceptar el regalo gastronómico aunque...
Las razones para no disfrutar un regalo gastronómico en ese momento pueden ser múltiples. En el caso del vino, puede no casar con la comida (maridaje); puede que haya suficiente cantidad para todos los invitados; o bien, puede no estar a la temperatura adecuada, etcétera. En el caso de regalos como dulces o alguna preparación personal del invitado, puede ocurrir lo mismo que hemos comentado. En estos casos se debe agradecer el detalle e indicar a las personas que han hecho el regalo que lo degustarán o disfrutarán en una ocasión posterior.
Resumiendo, los anfitriones deben aceptar los regalos de sus invitados, siempre que no estén 'fueran de lugar'. Como se dice popularmente, solo se le puede poner alguna objeción cuando 'no vengan a cuento'. Regalos demasiados caros, demasiado personales, regalos con 'dobles intenciones', etcétera. También un regalo se puede rechazar, si fuera necesario hacerlo, con buenos modales.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Las presentaciones se rigen por unas reglas muy sencillas que la mayoría de las personas conoce y practica
-
El uso de la camiseta suele ser objeto de polémica, sobre todo en el entorno de playas, piscinas, ríos...
-
Las copas en la mesa deben colocarse en un orden determinado, que puede atender a diversos criterio según el gusto de los anfitriones
-
En una fiesta, podemos hablar de casi todo, siempre que se haga de una forma discreta y prudente. Hay que tratar de hablar sobre temas muy generalistas
-
La pedida de mano es un acto privado que puede celebrarse en distintos lugares
-
Compartir un paraguas tienes sus reglas de cortesía. Responde más a cuestiones prácticas que a una simple regla de cortesía, que también debe tenerse en cuenta
-
El ascensor es un elemento común de los edificios que debemos utilizar con prudencia y un poco de sentido común
-
Los platos en la mesa y sus movimientos pueden variar en función de diversos factores
-
El uso del transporte público obedece más a criterios funcionales que a criterios de cortesía, sin perder las buenas formas, por supuesto
-
La decoración de la mesa es tan importante como el resto de elementos que la conforman.
-
Hay una gran diferencia entre ocupar un lugar y conquistarlo. Llegar a un espacio como el de un camping requiere de cierta prudencia y orden para no causar molestias al resto de campistas
-
Cuando llamamos a otra persona puede que no la encontremos en su domicilio u oficina. Dejaremos recado para que nos devuelva la llamada