![Logo Protocolo y Etiqueta](https://www.protocolo.org/extra/desimg/xcombined_proto_logo_idx_462x60.png.pagespeed.ic.5ZOHUrny0M.png)
El acontecimiento del matrimonio.
Ordinariamente se guarda un profundo secreto sobre los preliminares del matrimonio, porque siempre puede sobrevenir un rompimiento.
Del matrimonio.
Este acontecimiento, tan importante en la vida y bienestar del hombre, no lo es menos para la urbanidad, y a el vamos a consagrar el presente capitulo.
Ordinariamente se guarda un profundo secreto sobre los preliminares del matrimonio, porque siempre puede sobrevenir un rompimiento; pero cuando esté ya tratado, es necesario dar parte confidencialmente a los más amigos y a las personas a quienes debemos atenciones.
Estas, si se hallan en la misma población, hacen una visita de pláceme, y si se hallan ausentes, escriben una carta con el mismo objeto.
Tres o cuatro días antes de la ceremonia se convida a las personas que han de estar presentes, expresando en la esquela de invitación si han de asistir a la comida o al baile.
A los que no hayan sido convidados a la celebración del matrimonio ni a la comida, se les da parte por medio de esquelas algunos días después de haberse verificado.
Estas invitaciones solo exigen en cambio una visita.
Al matrimonio siempre preceden los regalos. Los que el joven manda a su futura, se llaman batea de presentes, y consisten en un objeto de tocador, joyas, diamantes, y algunas veces el traje completo de boda. Otros se limitan con poner en el cajón de un mueble elegante un bolsillo que contenga en oro la suma destinada a estos objetos, para que la novia la emplee a medida de su gusto.
El recién casado hace un regalo a cada uno de sus nuevos hermanos o más próximos parientes.
En la comida de boda, la recién casada debe hacer un papel enteramente pasivo, y guardar suma compostura.
Las chanzonetas y alusiones picantes son cosas de muy mal género, que si divierten por un instante a los concurrentes, hacen formar mal juicio del que las dice.
Si hay baile, es de rigor que lo abra la recién casada con la persona más distinguida de la reunión, o bien con su marido, y regularmente no vuelve a bailar en toda la noche.
Los convidados ofrecen en cambio a los recién casados y a su familia una comida o un baile, y a veces las dos cosas. Este convite se llama tornaboda, y en él se hacen los honores a los nuevos esposos.
Estos pagan las visitas en el término de quince días, y suelen hacerlas a la hora de etiqueta y con su traje de más lujo.
-
10818
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Es preciso abrir los dientes para leer o hablar, articulando cada palabra claramente.
-
La sociedad de hombres que no tuviese un punto u objeto especial, perecería por el mismo fastidio o falta de agrado.
-
Los niños deben aprender a respetar a los mayores cuando salen de paseo o van caminando por la calle
-
El aseo personal es una parte muy importante en la vida diaria de las personas.
-
No es decoroso ni cortés hablar de forma presuntuosa de un banquete o de una comida a la que uno asistió.
-
¿Hasta dónde llega la obligación de regalar, en las personas que no están comprendidas entre los padres o hermanos de ambos contrayentes?
-
Cómo escribir una carta y qué tratamiento debe utilizar la niña en cada ocasión.
-
Cartas utilizadas para recomendar a un sujeto por sus méritos poniendo de manifiesto sus buenas cualidades.
-
Los hombres se sirvieron de ellas a fin de comunicar sus pensamientos a los ausentes.
-
No conducirse con otro como no querría que se condujesen con él mismo
-
Cuando en Roma era todavía desconocido el uso de los tenedores se podía causar asco de muchas maneras, y por esto Ovidio fijó las reglas para tomar delicadamente los manjares con dos dedos.
-
La cortesía exige que, poco antes de comer y tomar las comidas, se laven las manos.