![Logo Protocolo y Etiqueta](https://www.protocolo.org/extra/desimg/xcombined_proto_logo_idx_462x60.png.pagespeed.ic.5ZOHUrny0M.png)
Conversar y hablar en sociedad.
El arte de conversar supone crear un equilibrio entre el tiempo destinado a escuchar y el destinado a charlar.
Conversar y hablar en sociedad.
Al contar un suceso, para confirmarlo, nunca deben usarse los juramentos u otras aseveraciones que sin serlo lo parecen. Cuando escuchemos una historia nunca se ha de interrumpir con preguntas necias e impertinentes, o cortar a la persona que habla, diciendo como algunos descorteses: "eso lo sé yo muy bien"; "esa anécdota me acuerdo de haberla leído en tal libro". Semejante defecto no solo es una grosería insufrible, sino que también un desaire para el sujeto que pensaba complacernos con su relación. Al que acaba de hacerla sería desmentirle abiertamente si, poniendo en duda alguna circunstancia o algún pormenor de poca entidad, se le dijese: "A ser cierto lo que Vd. refiere"; o "si Vd. dice verdad...", etc., en lugar de decir: "según lo que Vd. refiere"; o "atendido lo que Vd. acaba de manifestar", etc.
Alguna vez será permitido a fin de amenizar la conversación con la variedad continuar la narración que acaba de concluirse, usando previamente de estas expresiones: "ahora que me acuerdo"; o "a propósito de esto"; "en confirmación de lo dicho por el Sr. o Sra. N., voy a referir un lance...", etc.
Cuando a la persona que habla le falta algún término, no debemos sugerírselo, a menos que ella misma lo pidiere.
No habléis a cada uno sino de aquellas cosas que puede entender; acomodaos siempre a la edad, instrucción y situación de las personas. Hablar de táctica a un religioso, y de liturgia a un militar fuera tan ridículo e impertinente como el ostentar conocimientos de química delante de una mujer, y hablar de modas y de tocador a un austero filósofo.
Si nos vemos precisados a contradecir a una persona, no hemos de desmentirla abiertamente diciendo: "es mentira"; "eso es falso", o "no es así", como acostumbra la gente sin educación; en tal caso nos valdremos de estas expresiones: "Vd. me disimulará, pero creo que anda equivocado"; o "dispénseme Vd., caballero, si le digo que su opinión no me parece la más acertada"; "siento no estar conforme con el dictamen de Vd., pero me parece que debe ser así...".
Al referirse un hecho que ha ejecutado la persona con quien hablamos, los actos que no le hacen favor deben ponerse en impersonal o expresarse vagamente; v.gr. -por ejemplo- "uno se enfada a veces sin motivo suficiente", en vez de decir directamente: "Vd. se enfada sin ton ni son". Jamás la urbanidad se manifiesta mejor que cuando el hombre se ve obligado a decir una verdad desagradable.
-
16394
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
La fecha contiene el lugar desde donde se escribe el día, el mes y el año.
-
Reglas sencillas de cortesía, de buenos modales y de instrucción para las niñas.
-
Cartas utilizadas para recomendar a un sujeto por sus méritos poniendo de manifiesto sus buenas cualidades.
-
El reloj se lleva en el bolsillo del chaleco metido en una cadena de oro.
-
Presentación del niños antes reyes, personajes de alta categoría y autoridades religiosas.
-
Estamos entre dos extremos, y así se participa de entrambos. Altérnanse las suertes: ni todo ha de ser felicidad, ni todo adversidad.
-
La salutación es la piedra de toque del buen gusto. Hay mil maneras de saludar según las personas a quienes se saluda.
-
El hombre, antes que todo, debe ser bueno, y cumplir, por lo tanto, todos sus deberes
-
Qué es la urbanidad y otras preguntas generales relativas a la idea general de la urbanidad y la buena crianza.
-
Todos los hombres están sujetos a padecer aflicciones de ánimo.
-
La transición al estilo Luis XIV es muy bella, y la decoración interior es muy completa, muy animada, muy rica.
-
Se llama inscripción el título que se da a los sujetos a quienes se escribe, y se pone al principio de la carta.