Caja de tabaco.
No toméis pues tabaco; pero si este gusto se os ha hecho una necesidad indispensable, ocultaos cuando debáis satisfacerle.
Objetos de capricho.
Caja de tabaco.
Desde el tiempo de Moliere se hacía rechifla de las narices sucias con el tabaco, y con razón; porque ni la misma pipa, de la que las señoras tienen tanto miedo, ofrece un disgusto tan grande a un olfato fino como la tabaquera y sus resultados.
En unos, aquel polvo sucio causa un gangueo insoportable; en otros, cuyo cerebro excita continuamente, se ve que tienen que valerse de un pañuelo a cada paso, y dejar cortado un período elocuentemente empezado, por la necesidad de estornudar.
Es cierto que algunos grandes hombres han tomado mucho tabaco; testigo el gran Federico, de quien quiso ser mono Napoleón. En el día la Francia encierra más de seis millones de monos de esta especie.
No toméis pues tabaco; pero si este gusto se os ha hecho una necesidad indispensable, ocultaos cuando debáis satisfacerle, y en esto seguid discretamente la costumbre o el uso de aquellos entre quienes os halléis.
-
7295
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
La urbanidad prescribe que volvamos las visitas a los que nos las hacen, y que seamos los primeros en hacerlas a las personas superiores
-
Si hemos de ser corteses con nuestros iguales con una Cortesía amistosa, es menester serlo aun más con aquellos, que tengan alguna cualidad mayor.
-
Los padres deben enseñar a sus hijos a ser educados, prudentes, amables y sociables.
-
El mentir o cambiar una cosa, que es lo mismo, para disculparnos de lo que hemos dicho o hecho, y para evitar el peligro o la vergüenza que pueda resultarnos, manifiesta la gran cobardía y doblez de nuestro corazón
-
Es la manera de portarnos correctamente con nuestros semejantes. La acción o demostración con que una persona manifiesta a otra la atención, respeto o afecto en que la tiene.
-
Dejamos sentado que antiguamente era grande el exceso en el comer y en el beber, lo cual está probado con buenos y numerosos documentos.
-
No es lo malo escrutar; lo malo es que el afán de investigación se traduzca en juicios críticos, en comentarios que única y exclusivamente pueden redundar en daño ajeno
-
Cuando se visita a alguien, si la puerta está cerrada es muy descortés golpear fuerte, o dar más de un golpe.
-
El niño en el dormitorio y la hora de acostarse.
-
La ventanjas de la urbanidad, el despejo y la calidad del niño urbano.
-
Sugerencias y consejos para servir la mesa de forma correcta.
-
Cómo debe proceder una niña bien educada con estas personas.