Logo Protocolo y Etiqueta

Consejos de etiqueta para que nuestro perro se comporte de maravilla en el parque o en otros espacios públicos

Los perros son animales muy fieles a sus dueños, pero también, pueden ser muy molestos si no están bien educados

Se lee en 4 minutos.

Los perros deben acostumbrarse a obedecer a sus dueños
El comportamiento de los perros tiene mucho que ver con la educación que le han dado su dueños. Los perros deben acostumbrarse a obedecer a sus dueños

Socialización canina: cómo conseguir tener una buena experiencia dando un paseo con nuestro perro

Salir al parque o dar un paseo con nuestro perro suele ser una experiencia agradable y divertida, pero también requiere atención y un buen conocimiento de cómo es nuestra mascota para garantizar la seguridad y el bienestar tanto de nuestro perro como el de otros perros. Los paseos y el tiempo en el parque son esenciales para la salud física y mental de nuestros perros -diríamos, por las mismas razones, que también es buena para los propios dueños-. Sin embargo, para que estas experiencias sean agradables tanto para ellos como para los demás, es importante que sepamos cómo fomentar un comportamiento adecuado y una buena socialización de nuestra mascota.

Si queremos que nuestro perro se convierta en un 'ciudadano' ejemplar en la calle y en el parque vamos a ver algunos consejos importantes. El aprendizaje puede ser más o menos lento dependiendo de cada perro.

1. Familiarización gradual con el entorno.

Podemos empezar a pasear a nuestro perro cerca de algún parque, observando cómo reacciona ante la presencia de otros perros. Vamos a dejar que se acerque a otros perros, se huelan y ver cómo reacciona. Ante cualquier muestra de agresividad, es mejor retirarse.  Esta fase de familiarización nos ayudará a identificar posibles señales de miedo, ansiedad o agresividad que requieran atención. Si vemos algún comportamiento reiterado fuera de lo 'normal' podemos consultas con algún especialista.

2. Supervisión constante como si fuera un niño pequeño.

Algo fundamental es prestar atención a nuestro perro durante todo el tiempo que estén en el parque o en cualquier otro espacio. Vamos a observar cómo interactúa con otros perros, evitando distracciones como el teléfono móvil, lectura, etcétera. Recuerda que los perros desconocidos pueden desencadenar comportamientos agresivos, por lo que es crucial vigilar de cerca para evitar situaciones desagradables o peligrosas. Como diría mi abuela, hay que andar con cien ojos, porque en solo unos segundos se puede complicar la cosa.

3. Comunicación con otros dueños de perros.

No debemos dudar en hablar con otros dueños de perros. Estas conversaciones nos sirven para intercambiar información sobre la personalidad y el comportamiento de cada perro. Esta información es muy valiosa porque puede ayudarnos a predecir cómo podrían interactuar entre sí nuestros perros. Hay ciertas 'combinaciones' de caracteres que pueden ser un poco peligrosas cuando se juntan. Y, por el contrario, hay otras que pueden ser muy beneficiosas para ambas mascotas.

4. Tiempo de juego individual.

No olvidemos dedicar tiempo a jugar con nuestro perro. Además de permitir que nuestra mascota socialice con otros canes, es importante darse un tiempo para jugar con él. Esto fortalecerá el vínculo que tenemos con él y le proporcionará la actividad física y mental que todo perro necesita. Un juego activo y divertido puede ser una excelente forma de reforzar la confianza entre mascota y dueño. Y como hemos comentado anteriormente, también es bueno para nosotros. Tanto en la parte física como en la mental.

5. Educar con paciencia y tenacidad.

La educación, como en el caso de las personas, es una tarea que requiere constancia, tenacidad y mucha paciencia. No hay que tirar la toalla porque no consigamos resultados de una manera tan rápida como nos gustaría. Además, no olvidemos que podemos recurrir a la ayuda de un profesional, si la cosa se pone un poco más difícil de lo que pensábamos. Los perros son muy listos y suelen saber cómo encontrar nuestros puntos más débiles para aprovecharse de ellos. Nosotros tenemos que ser un poco más listos que ellos.

6. Respetemos los espacios de los demás.

Igual que a una visita en nuestra casa, no le podemos 'imponer' nuestra mascota a los demás. Si nuestro perro no es muy sociable o presenta comportamientos ansiosos o agresivos, lo mejor es evitar llevarlo a lugares con gran afluencia de otros perros. Optaremos por paseos tranquilos en entornos menos concurridos. Cada perro tiene su propia personalidad y necesidades, y es importante respetarlas para garantizar su bienestar emocional y evitar problemas con otros perros o personas.

No olvidemos que la paciencia, la observación y la constancia son claves para que nuestro perro se adapte bien a las interacciones sociales en el parque o en cualquier otro lugar. Un perro bien educado suele ser el reflejo de unos dueños educados y responsables.

 

Su opinión es importante.

Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.

Contenido Relacionado