Procesión Jueves Santo: Visita a los Sagrarios. Corporación Profetas
El Jueves Santo al mediodía, y a la hora señalada por el hermano Presidente Cuadrillero, se reunirán los hermanos Profetas a los que les haya correspondido el número en el sorteo, y se enfundarán los trajes bíblicos, y, reglamentariamente ataviados
Protocolo para la procesión del Jueves Santo
Reglas de etiqueta para el desfile con las trajes bíblicos
Terminada la comida de hermandad de la reunión del Jueves Santo al mediodía, y a la hora señalada por el hermano Presidente Cuadrillero, se reunirán los hermanos Profetas a los que les haya correspondido el número en el sorteo, y se enfundarán los trajes bíblicos, y, reglamentariamente ataviados, se dirigirán, encabezados por el Estandarte y el hermano Cuadrillero a la casa del Hermano Mayor de la Cofradía.
En este desfile, el traje bíblico irá complementado únicamente, por el rostrillo, que el hermano profeta deberá llevar correctamente en su mano derecha. No se llevará pues, ni peluca ni martirio.
Llegados a casa del Hermano Mayor de la Cofradía, se presentará a éste el hermano Cuadrillero y le comunicará nuestra presencia. Los hermanos profetas esperarán en un lugar adecuado el inicio del desfile para incorporarse a él.
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La ubicación de la Corporación de los Profetas para el desfile, en el seno de la Cofradía será: dentro del grupo de las figuras bíblicas (apóstoles, virtudes, y profetas), en último lugar, por delante de la Centuria Romana de la Cofradía.
Se desfilará, con el orden y la corrección que nos caracteriza, en fila de a uno, de modo, que cada hermano, solo podrá ver al que lleva delante, y no se moverá, hasta que no se mueva el que le precede, no moverá la cabeza, ni se dirigirá a los espectadores, de acuerdo con lo que dicen nuestros Reglamentos vigentes.
En el lugar prefijado para el término del desfile, y a la orden de nuestro hermano Cuadrillero, se abandonará el mismo, y precedidos de nuestro Estandarte, nos dirigiremos al Cuartel de Semana Santa de la Corporación; allí los hermanos Profetas, se desnudarán del traje bíblico, ayudados por los demás, colocando correctamente todos los trajes, y preparando los rostrillos, pelucas y martirios, para el desfile del Viernes Santo por la mañana.
Terminada esta labor los hermanos tomarán un refrigerio, comentando las anécdotas acaecidas y cuantas cosas pudieran redundar en el mejor desfile de la Corporación.
Antes de irse, el Presidente Cuadrillero, recordará en voz alta y clara, la hora fijada para el desfile del Viernes Santo por la mañana.
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