
Volver a los buenos modales, les abrirá las puertas a nuestros hijos
Nuestros hijos son nuestro espejo. ¿Cómo queremos vernos reflejados en ellos?
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Volver a los buenos modales
Los padres deben educar a sus hijos para que tengan éxito el día de mañana
Los padres nos cansamos de ser tan repetitivos con los hijos y llegamos a sentir frustración cuando no nos obedecen. Los niños pertenecen a dos áreas: la escolar y la social. En ambas se requieren habilidades que determinarán su éxito el día de mañana y ninguna deja de ser importante.
"Cierra la boca cuando estés masticando, siéntate como una señorita, no subas los codos a la mesa, sostén correctamente tus cubiertos, no cruces la pierna en la iglesia", estos y otras más, son reglas de educación y cortesía que los padres enseñan regularmente, pero, en ocasiones, pareciera que los hijos se esmeran en contradecir o desobedecer.
En mi opinión, debemos volver a las épocas de las abuelitas, o bisabuelas, donde el caballero le cedía el asiento a la dama, donde el lustrar los zapatos era de suma importancia no solamente para fines de semana, donde había respeto de menor a mayor y la opinión de un adulto, era invaluable.
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A raíz de mucha observación, tomé la decisión de ahondar en mi preparación; no es lo mismo papá o mamá educando todos los días, que una persona extraña y ajena a la familia, que con argumentos contundentes y estudiados, exponga los motivos de un comportamiento que les llevará al éxito.
Vivimos en un mundo donde todo es exprés (las noticias, la fotografía, la comida), pero, si nuestros hijos pierden la etiqueta social (y en determinados casos no saben ajustarse al protocolo) al acudir como invitados a algún lugar o participar en una ceremonia, podrían perder más que unas cuantas horas, podrían perder amistades u oportunidades si no se saben comportar adecuadamente. Bien dice el dicho que "buen porte y buenos modales, abren puertas principales" ...
Nuestros hijos son nuestro espejo. ¿Cómo queremos vernos reflejados en ellos?, ¿qué queremos transmitirles para que sean futuros empresarios, dueños de sus propios sueños? Regala a tus hijos una educación integral, donde no solo aprendan cómo comportarse en la mesa, sino todos los detalles que les hará atraer el triunfo desde ahora.
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