Educación y cortesía en el uso del paraguas
El paraguas además de ser un utensilio para resguardarse de la lluvia puede ser un objeto molesto si no se lleva con cuidado
La forma de correcta de llevar un paraguas
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Las reglas de cortesía o etiqueta a seguir en diferentes ocasiones, lugares y situaciones siempre deben ir regidas, amén de por algunas normas escritas o no, por el sentido común. Por eso, no suele ser muy habitual encontrar códigos o reglas que contemplen todos y cada uno de los comportamientos del ser humano.
Nosotros, en nuestro intento por cubrir amplias parcelas sobre el saber estar y las buenas maneras vamos tratar de contemplar estas situaciones que nos parecen de una gran utilidad práctica y real para casi todo el mundo. En esta ocasión hablamos del paraguas.
El paraguas es un complemento, no un arma
Solo hay que mirar a nuestro alrededor para observar, cualquier día de lluvia, cómo se utiliza el paraguas como un elemento indispensable para moverse cómodamente por la calle sin mojarse demasiado. Pero de la misma manera, es curioso observar como algunas personas utilizan el paraguas más como un arma que como un elemento de utilidad para resguardarse de la lluvia.
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Si quiere que "su paraguas" y su espacio sea respetado, usted también debe respetar a los demás. Hay que compartir un espacio común que es limitado. Por eso es bueno conocer algunas sencillas reglas de educación.
10 consejos para manejar de forma apropiada un paraguas
1. Los paraguas deben ser de un tamaño adecuado para circular por la calle. Es muy bonito ver algunos diseños muy originales, pero nada prácticos para utilizarlos en la calle, al menos, en calles muy concurridas. Piense por un momento, que todo el mundo hiciera lo mismo. ¡Menudo panorama!
2. Los paraguas no se abren en los sitios cerrados o a cubierto. No hay ninguna razón para abrir un paraguas en un sitio cerrado o cubierto, a no ser que sea una tienda de paraguas. Además, en algunas culturas, es un gesto que, dicen, trae muy mala suerte. Pero supersticiones aparte, no hay porqué molestar a otras personas abriendo un paraguas dentro de cualquier recinto cubierto.
3. Cuando circule por una calle estrecha, la persona más alta es la que levanta el paraguas para que pase la persona más baja con su paraguas. Si ambas personas son de alturas similares se pueden ladear ligeramente los paraguas -generalmente hacia su derecha-.
4. En calles con grandes aglomeraciones de público, y por lo tanto, de paraguas, debe guardarse el mismo comportamiento que hemos indicado en los párrafos anteriores. Los más altos levantan el paraguas para que pasen los más bajos. En caso de alturas similares, bien uno puede levantar un poco el paraguas y otro bajarlo ligeramente, o bien puede ladearse un poco cada paraguas para no tropezarse.
5. El paraguas cerrado, si no es de mano o plegable que pueda caber en un bolso, cartera o similar, se lleva a modo de bastón pero nunca perpendicular al cuerpo que pueda tropezar e incluso pinchar a otra persona. No se lleva un paraguas a modo de lanza como un caballero medieval.
6. Un paraguas se cierra a la puerta de la casa o establecimiento donde se va a entrar. No es demasiado correcto entrar con el paraguas abierto a una casa o establecimiento. ¿Se puede imaginar lo que estorbaría y cómo pondría todo de mojado?
7. Si va acompañado de una mujer o una persona mayor, usted debe sujetar el paraguas que les cubre a ambos. Si hay poca diferencia de edad pero mucha de altura es mejor que lo lleve la persona más alta aunque sea la mayor. Para la persona de menor altura supondría un mayor esfuerzo tener levantado su brazo para poder mantener el paraguas a una altura adecuada a la de su acompañante.
8. Aunque el paraguas lo debería de llevar la persona de mayor altura, si es muy grande, muy pesado o incómodo de llevar -porque hace mucho viento, por ejemplo-, lo mejor es que lo lleve la persona más joven o que tenga mejor "forma física".
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9. Si se para con alguna persona en la calle, para un simple saludo, pueden ladear ligeramente los paraguas; para charlar o platicar un rato, una de las dos personas, debe cerrar su paraguas y permanecer debajo del otro. O mejor aún, hacerse a una lado y buscar un sitio donde permanecer a cubierto. Por supuesto, no se gesticula con el paraguas en la mano ni se apunta con él a nadie ni a nada.
10. Si se encuentra con algún amigo o familiar que lleva su mismo camino y deciden ir juntos lo mejor es que uno de los dos cierre su paraguas y se cobijen bajo uno solo.
El paraguas como cualquier otro complemento cumple una función -resguardarse de la lluvia-, y no debe ser utilizado para ninguna otra función, salvo como un punto de apoyo -similar al de un bastón- cuando está cerrado.
Infografía: Educación y cortesía en el uso del paraguas
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