El número de invitados ideal para una boda, ¿existe?

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A la hora de planificar una boda es fundamental saber a cuántas personas vamos a invitar. Sobre todo si no hacemos dos invitaciones distintas, como se hacen en algunas bodas. Hay novios que invitan a la ceremonia pero no al banquete. El número de invitados a una boda es posible que sea una de las decisiones más importantes que deben tomar los novios. En este momento es cuando empiezan a surgir las preguntas:

¿Debemos invitar a toda su familia?

¿Invitamos a los amigos cercanos?

¿Es obligado invitar a los compañeros de trabajo?

Estas y muchas otras preguntas son solo el principio del camino para crear la lista de invitados.

Pero antes, los novios se tienen que preguntar qué tipo de boda quieren. Porque si se opta por una boda íntima, el tema de los invitados no es un gran problema. Ahora bien, si no es una boda íntima, vamos con el tema de los invitados.

¿Cómo podemos calcular el número ideal de invitados para una boda? 

El número ideal de invitados a una boda puede variar según diversos factores, dejando a un lado la parte más afectiva. Hay que ser realistas. Lo que suele influir en la mayoría de los casos es el dinero. ¿Con qué presupuesto contamos?

Si el dinero no es un problema, entonces podemos centrarnos en las preferencias personales de los novios. Solo habrá que 'pelear' un poco para incluir a todos, aunque algunos de ellos no gusten demasiado al novio o a la novia. Por eso decimos lo de 'pelear', aunque estaría mejor dicho negociar. Podemos llegar a un acuerdo sobre los invitados menos queridos por ambas partes. Todo es hablarlo.

¿Pero hay alguna fórmula para calcular el número de invitados o no?

No vamos a mentir. No. No hay una respuesta única y correcta sobre el número ideal de invitados a una boda. La fórmula ideal es combinar y encontrar un equilibrio entres todos estos factores:

1. Presupuesto: El presupuesto suele ser uno de los factores más importantes a considerar para calcular el número de invitados. Los novios deben tener en cuenta que cada invitado tiene un coste. Una vez que se tiene el coste aproximado por invitado, solo hay que hacer las cuentas. Mejor cuentas realistas. Contar con algunas expectativas demasiado optimistas sobre los regalos de los invitados, puede fallar.
2. Lista de invitados: Con el tema del dinero resuelto, los novios deben hacer sus propias listas con las personas más importantes en sus vidas. Una vez hechas estas dos listas, es hora de negociar. Establecer prioridades y el grado de afinidad con las personas. Es decir, no siempre la suegra, el amigo gracioso, el pesado, el cursi, etc., de parte del novio o de la novia le cae bien a uno de los dos. Es cuestión de encontrar un equilibrio y, en muchos casos, ceder. Hacer concesiones de uno y otro lado. Es lo que en protocolo se llama 'peinar una lista'. En este caso no se trata de cargos sino de afinidad.
3. Capacidad del lugar: Es posible que el sitio que guste e incluso encante a los novios no tenga el suficiente aforo para acoger a todos los invitados. Hay dos opciones: buscar otro sitio o bien reducir el número de invitados. Esto únicamente está en manos de los novios.

Es bueno recordar que el número ideal de invitados a una boda es una decisión personal y única para cada pareja. Es importante ser realistas al tener en cuenta los factores que hemos indicado anteriormente, como el presupuesto, la capacidad del lugar y la lista de invitados. Mientras más realistas sean, menos sorpresas se llevarán.

No hay que olvidar que el número de invitados no determina la 'calidad' de una boda. Ese dicho tan popular de "burra grande, ande o no nade", no vale para los invitados de una boda.

Los novios deben tener en cuenta que una buena planificación es lo único que puede garantizar que la boda sea un éxito. Al final, lo fundamental es que los novios disfruten de su día especial, rodeados de las personas más importantes y queridas de sus vidas.