Las diversiones. Divertirse con educación
Las diversiones son ejercicios a los cuales se puede dedicar algún tiempo del día, para liberar el espíritu de las ocupaciones serias
El tiempo libre y los momentos de ocio. Divertirse con educación
Aquella urbanidad
Las diversiones son ejercicios a los cuales se puede dedicar algún tiempo del día, para liberar el espíritu de las ocupaciones serias, y el cuerpo de los trabajos fatigosos que se le dan durante el día.
Es muy razonable descansar de vez en cuando; lo necesitan tanto el cuerpo como el espíritu, y Dios nos ha dado ejemplo de ello, desde el comienzo del mundo, cuando descansó un día entero, según la Escritura, después de haber trabajado sin interrupción seis días enteros en la gran obra de la creación del mundo.
Nuestro Señor invitó también a los Apóstoles a descansar con él, al regresar de los lugares donde les había mandado para predicar el Evangelio.
Te puede interesar: La interesante historia de las vacaciones. ¿Desde cuándo disfrutamos de las vacaciones? (con vídeo)
Sin embargo, como a menudo sucede que se divierte uno en contra de su conciencia, o a expensas de otros, o violando en algo las reglas de la urbanidad, ya dándose a diversiones que la decencia no permite, ya tomándolas de modo poco honesto, o mezclando con ellas algo descortés o de mal gusto: parece necesario exponer aquí las diferentes clases de diversiones que se pueden tener, y mostrar luego el modo cómo utilizar el tiempo en ellas, para obrar con cordura.
Qué diversiones se consideran apropiadas
Las diversiones que se pueden tener son:
- el recreo,
- el juego,
- el canto y
- el paseo.
Se tratará aquí de estas cuatro cosas una tras otra, y del modo de hacerlas bien.
-
1520
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
El paseo es un ejercicio conveniente que contribuye grandemente a la salud del cuerpo y hace al espíritu mejor dispuesto a las actividades que le son propias
-
No debe haber en el rostro nada que sea severo o repugnante, no debe aparecer tampoco nada huraño ni salvaje
-
El hombre de buenos principios no sólo sabe conducirse dignamente con las personas con quienes está relacionado, sino que tributa también sus consideraciones a la sociedad entera.
-
Las personas de una misma familia que se encuentran desacordadas no pueden jamás recibir dignamente a una visita. La paz doméstica es fundamental tanto para la convivencia cordial como para las relaciones sociales de la familia
-
No hay que tomar la costumbre, sin embargo, de escupir con demasiada frecuencia y sin necesidad, lo que no sólo es muy descortés sino que además repugna e incomoda a todo el mundo
-
Veo con tristeza que la "burricie" prima más cada día sobre el civismo y las buenas maneras.
-
La urbanidad es el buen proceder, la compostura, la atención y el respeto por nosotros mismos y por nuestros semejantes.
-
Los tratados de urbanidad siempre han existido para las clases pudientes y para guiar los usos sociales de la aristocracia
-
Las señoras no pueden ser invitadas a festines sino por otras señoras, o por un caballero casado en unión de su esposa.
-
Llámase urbanidad al conjunto de reglas que tenemos que observar para comunicar dignidad, decoro y elegancia a nuestras acciones y palabras.
-
Hay comportamientos no reglamentados pero que la lógica del trato social actual señalan
-
El recreo discurre normalmente conversando de manera desahogada, contando historias agradables y graciosas que provoquen la risa y la diversión del grupo