Cuando se utiliza azúcar molida, ¿debe haber una cuchara especial en el azucarero?... o cada invitado se sirve azúcar utiliando su propia cucharilla?

jajajajaja

Os voy a contar un chiste. Un señor fue al oftalmólogo y le dijo que cada vez que se servía
el desayuno le dolía un ojo. El facultativo se asombró pero a fuerza de tanto escuchar cosas, atinó a preguntar: Dígame amigo, cuando usted bebe de la taza quita la cucharilla?

El porqué (junto, por cierto):

Es más sencillo, Lidia: la cuchara se emplea únicamente para diluir el edulcurante, azúcar o sacarina; una vez diluido, se coloca en el platito, porque su función ha terminado, pues que no sirve para beber, sino para diluir.

Una cucharilla difícilmente puede vencer una taza; y, por la misma razón, tan "peligrosa" sería en la taza como en el platito, porque podría caerse y manchar. No, no es esta la razón. Es meramente funcional, y de sentido común.

De todos modos, habría que ver, por ejemplo, cómo desayunamos en la intimidad, si siempre observamos esta regla de tan "grande importancia"cuando nadie nos `ve´. Si se es tan puntilloso en estas cuestiones, y si son tan lamentables de ver, se supone que, en otros órdenes, somos igualmente probos. Es, por tanto, ridículo darle tanta importancia a una cuestión tan menor; es decir: se le debe dar la relevancia que tiene, y hacer examen de consciencia, porque todos, usted, yo y cualquiera, hemos pecado, siquiera en alguna ocasión, de aquello que tachamos.

Anónimo: escribí "por qué" separado, porque estaba repitiendo la forma interrogativa.

Pongo al cielo por testigo que jamás, pero jamás, he dejado una cuchara dentro de una taza cuando terminé de diluir el azúcar.
Pero como docente creo que es interesante comentar el segundo punto:

El dejarse estar en el saber estar cuando estamos solos o en la intimidad de la vida familiar.
No estoy de acuerdo en este desdoblamiento de la conducta.

Como lo sé "purista" del idioma y falto de humor, le aclaro que tantos: estar, estamos, estoy, son un juego de palabras.

Una vez que recibimos la información y las técnicas propias del saber estar y de los modales en la mesa, las incorporamos, las hacemos nuestras y aplicándolas a diario llegamos a la naturalidad, máximo ideal de los buenos modales.
Mientras se note que repetimos gestos y actitudes sacadas de manual que sólo aplicamos torpemente cuando tenemos quien nos observe, no hemos alcanzado la verdadera buena educación.
Recomiendo que en casa, entre amigos y sobre todo cuando estamos solos, apliquemos todas las sencillas reglas del arte de comer.
Mi madre que es muy mayor, desde hace 30 años come sola en una enorme mesa de comedor, siempre admiré que a diario ponga su mesa con el mismo exquisito cuidado que pone los domingos cuando esa mesa se llena de hijos, nietos y bisnietos.

Antes de nada aclararé que al decir "el porqué", es decir, la razón, se escribe junto pero con acento en la "e"`para diferenciarlo del "porque" que precede una explicación.

Ahora debo pedirles, que no hagan caso a alguien que se aburre tanto como para dedicarse a fastidiar en un foro de protoclo e intentemos usar un poco el sentido común para contestar y dejar de lado las ofensas personales.

Sí, Lidia, es así: antes en casa que fuera de ella; todos tenemos madres distinguidísimas de quienes hemos mamado estas cosas y no traemos como ejemplo, precisamente, porque no has enseñado a callar lo propio y lo viejo. Pero si pensaras un poco en la naturaleza huamana, (te) reconocerías que, incluso la persona reputada de mejor educada, descuida a veces esta o aquella regla, no solo en la intimidad, si también socialmente, porque solo la regla es siempre y dondequiera regla, los seres humanos somos otra cosa, por más que las hayamos interiorizado desde niños (la naturalidad de que hablas no es más que una suerte de impostura). Pero incluso la regla es regla porque se le opone la excepción.

No obstante, usted, como debe de ser sobrehumana, jamás debe de haber descuidado ninguna de estas reglas -importantísimas y primeras, sin duda-. Pero no olvide que, entre ellas, está la de no ofrecerse uno mismo -o su mamá- como ejemplo positivo de algo.

(Sobre "el porqué", forma sustantiva del interrogativo "por qué", ya Víctor lo ha explicado.)

No me ha ofendido Santiago en absoluto. No se quien me contesta en el post porque no lo firma pero sea quien fuere, no molesta quien quiere sino quien puede.

Por suerte, llevando diez años en protocolo de empresa (ejerciendo activamente), no tengo que justificar ante nadie mis conocimientos. No dejo de aprender en otros áreas del protocolo y saber estar ni un día y no me averguenza aprender lo que para otros son "tonterias". Si todos fuesemos lo suficientemente humildes para reconocer que nos queda mucho por saber, todos seriamos mejores.

Por desgracia en este foro, muchas veces, lo que sobra es arrogancia y ganas de ofender gratuitamente.

Un saludo,

Pues no se la explicación. Sin duda soy un ignorante completo. QAgradecería la explicación.

Espero que nadie se ofenda con mis formas. Se que Esther no lo hace.

Solo me gusta enfatizar para que nos demos cuenta de lo importante de algunas sutilezas

No creo que nadie pueda ofenderse nunca por tus respuestas, Santiago -sonreirse, probablemente sí.

(Te obsequio una sutileza, pues que las juzgas tan importantes: "sé", de "saber", se acentúa.)

Que no se deja una cuchara abandonada dentro de una taza de té o café, ya ha quedado sobradamente explicado, pero creo oportuno ampliar este tema ya que es de gran importancia para quienes se interesen en las buenas maneras.

Mientras comemos hay momentos de "espera", ya sea porque estamos bebiendo, hablando, masticando o simplemente dándonos tiempo para saborear.
¿Qué hacer con la cuchara mientras tanto?

· Cuando nos presentan una entrada servida en copa o cuando el postre se sirve en copa, ésta siempre estará colocada sobre un plato tamaño postre, durante los "respiros", la cuchara se deja sobre el plato de base y jamás dentro de la copa
· Cuando nos sirven consomé, se deja sobre el plato de base y no dentro de la tasa con dos asas propia de está entrada

Cuando terminamos nuestro café, té, postre servido en copa o consomé, la cuchara queda apoyada sobre el plato del lado derecho.

EL POR QUÉ:

Una cuchara abandonada dentro de una taza la podría desestabilizar y volcarla.
Para beber de una taza de la que no retiramos la cuchara tendríamos que desarrollar una técnica de trabado con el pulgar (que lamentablemente he visto practicar) y que sencillamente es inaceptable dentro de las buenas maneras.
Existe un tema estético que justifica en sí mismo esta regla, queda muy desagradable y desproporcionada una cuchara dentro de una taza.

Lo único que impera es la lógica: si en la mesa no cogen las tazas, tienes que sujetar el plato y taza con las manos. La cuchara debes dejarlo sobre el plato, si vas a usarlo, si no, puede retirarse (pero no sobre la mesa).

Un consejo, las pastas una vez que se han cogido y mordido, no debes volver a depositarlas en tu plato: como un canape, se come de varios bocados.

Un saludo,

1º La cucharilla jamás se suelta dentro de la Taza BAJO NINGUN CONCEPTO JAMÁS!!!

2º Siempre que no estés sentado en una mesa de comedor se sujeta el plato y se eleva a la altura del pecho con la izquierda y se eleva con la derecha. Se eleva la taza, nunca la cabeza.

Lo de la cucharilla dentro de la taza no lo había oido nunca. Nunca te acostarás sin saber una cosa más!

No me sorprende!!

Pues es la norma más básica del mundo.

Jamán ni una milésima de segundo, ni con la excusa de que se enfria antes. Nunca. Con la cucharilla se remueve y se vuelve a dejar sobre el plato.

EL TE

Tradicionalmente el té se sirve en el salón, sólo se sirve en un comedor cuando el número de invitadas lo justifica.

Té servido en comedor:

Cuando el té se sirve en un comedor, las invitadas están sentadas a la mesa y por lo tanto tienen una excelente superficie de apoyo para sus tazas, platos y servilletas.

· Para beber toman sólo la taza, el plato se deja en su lugar sobre la mesa del comedor
· Antes de beber se limpian los labios con la servilleta, depués de hacerlo se secan los labios con la servilleta
· La servilleta permanece siempre doblada a la derecha del plato, en un comedor y para el té nunca: se despliega, ni se coloca en la falda
· Delante de cada invitada se colocará el plato tamaño té (apenas más pequeño que el de postre), y arriba a la derecha la taza de té con el asa del lado derecho y con su cuchara pasando por debajo. Las tazas ocupan el lugar que en una comida ocupan las copas.
· La cuchara sólo se usa para diluir el azúcar, esto se hace brevemente y sin producir ruido. Al terminar INMEDIATAMENTE, retiramos la cuchara del interior de la taza y la colocamos en su lugar (bajo el asa de la taza).

Té servido en el salón:

· A cada invitada se le entrega un plato (tamaño té) con un tenedor pequeño para tortas y su servilleta
El plato se coloca sobre la mesita baja y la servilleta sobre la falda
· Se recibe el té servido por la dueña de casa y se lo apoya sobre la mesita o se comienza a beber sosteniendo el plato con la mano izquierda y tomando la taza con la derecha.
· Si endulzamos con azúcar, revolvemos breve y silenciosamente y colocamos INMEDIATAMENTE la cuchara sobre el plato

LA CUCHARA NO DEBE PERMANECER NI POR UN SEGUNDO DENTRO DE LA TAZA INMÓVIL Y ABANDONADA, UNA VEZ QUE REVOLVIMOS LA RETIRAMOS Y LA COLOCAMOS SOBRE EL PLATO

· El té se bebe en varias etapas, cada vez que dejamos de beber volvemos a apoyar la taza y el plato sobre la mesa baja
· Para comer tomamos nuestro plato y nos servimos

EL CAFÉ

Los tres momentos de una comida son: el aperitivo o copa de bienvenida que se sirve en el salón, luego se pasa al comedor para servir la comida, y terminado el postre se vuelve al salón para tomar el café y los licores.
Por lo tanto el café se sirve en el salón y se toma sosteniendo con la mano izquierda el plato y tomando la taza con la derecha.
Se tomá de una sola vez y al terminar se apoyan el plato y la taza sobre la mesa baja o en alguna otra mesa del salón.

Espero haber entendido mal, o que usted entendió mal, pero si realmente no sabe este simple detalle sobre el manejo de las cucharas, que es una tontera básica del saber estar y las buenas maneras, usted es una impostora en en este foro y si tuviera decoro no nos importunaría en el futuro.

POR FAVOR: no se haga la mártir, ni la pobrecita, ni la ofendida: USTED NO SABE NADA DE PROTOCOLO NI DE ETIQUETA.

Muchas gracias por todas sus respuestas. Soy Algo joven y recién estoy empezando a tener una vida social que me presenta retos en la formalidad.
Por favor señor Santiago, Ud. ha sido tan amable conmigo, no se refiera de esa manera a la Señora. Es obvio que Ud. conocé más y ha estructura su respuesta, pero yo pedí algunos consejos en general.

Yo no soy una experta en protocolo ni mucho menos, espero terminar la escuela (jaja) pero si alguien pide consejo y me siento minimamente capacitada para contestar lo voy a hacer, es más la Señora aclara muy bien su competencia.

Saludos a todos.

Sí, sí, sí; pero pregúntenle por qué no se debe dejar la cucharilla en la taza.

El meñique vigorosamente erecto.