Siempre oí decir a mi abuela: "Comida y conversación cuanto más breve mejor". Siempre nos lo decía cuando hablábamos mucho a la hora de la comida. Como bien dice Mariano, mi abuela decía que lo dejaramos para la sobremesa.

Creo que una de las mejores opciones es preguntarle si le importa que sirva el licor aunque el no haya terminado de comer. Asi el podrá seguir comiendo y las demás personas degustando el licor.

Es algo parecido a lo que ocurre cuando nos sirven en un restaurante un plato y esperamos por el resto; los comensales suelen invitarnos a que empecemos y no esperar por ellos. Así nadie se siente incómodo.

De ahora en adelante cuando ofrezca una comida diré a mis comensales: Parejos como en la danza”, es incomodo estar esperando a quien se atrasa en los tiempos de la comida por su despacio masticar o bien por su prolongada platica.

Como dice Mariano, para eso esta la sobremesa.

Saludos.

Cuate

La verdad es que no hay mucho que opinar.Las prsonas invitadas deben saber que no pueden ir a su aire. Para conversar despacio está la sobremesa o la tertulia.Es de buen tono, por lo tanto, observar cómo van los demás y no quedarse infinitamente, retrasando a los demás, como si fuera una gracia el hacerlo.